domingo, 1 de mayo de 2011

Viaje unicorniano

Sí, soy consciente de algo...
¡llevo sin escribir semanas!

Pero tranquilos, no es porque haya abandonado todo esto, es porque he vivido una odisea!
Todo el mundo sabe que en el planeta en el que vivimos los humanos hay una fiesta llamada Semana Santa...
Bueno, pues vuestra escritora favorita ha decidido hacer un viaje unicorniano para conocer el mundo.

En mi viaje me acompañaron...
Básicamente compartí asiento en un autobús de unicornios locos, dormidos, agresivos, fumados... Pero el viaje mereció la pena.
No visité mi reserva de Yepelin por falta de tiempo, pero fui hasta amsterdam o parís para ver a PAPÁ UNICORNIO.
Ahora os preguntareis...¿quién es papá unicornio?
Pues, es algo así como Dios o Buda (Buda for the win)  pero para los Unicornios. Mis amigos de un sólo cuerno creen en un animalillo que se aburría y decidió crearlos, y esa es al historia.
El problema es que cuando decidí ir hasta Amsterdam no conté con los peligros que me acechaban.

Mi primera impresión sobre el lugar fue fenomenal, pero poco tardó en morir uno de mis amigos. Un Holandés "Tó LoKoh" decidió atropellarlo con la bicicleta. Y es que en Amsterdam hay más bicicletas que población total. Ya os podéis hacer una idea de el tráfico que hay.

Si habéis intentado buscar algo...lo siento pero perdéis el tiempo. Un unicornio furioso se ha comido los coches Holandeses,.. ahora sólo hay bicis y motos. Ah si! y tranvías locos.

Dejando de lado el tema del tráfico, cuando fui a buscar a PAPÁ UNICORNIO no lo pude encontrar. Al parecer había huido a Bruselas porque las "chicas" del barrio rojo estaban enfadadas con el. El barrio rojo es un lugar donde hay chicas semidesnudas en un escaparate... más comúnmente llamadas prostitutas. La cuestión es que el tonto de papá se había ido sin pagarlas, y en un lugar como éste no es muy recompendable hacer esto.
Decidí ir a Alemania, pero un Unicornio me alertó de algo: Hitler me buscaba.
Fué una sorpresa la verdad; al parecer hitler quería recuperar su unicornio y apareció en forma de fantasma para secuestrarme. Su plan no funcionó, por eso huí a Bruselas.

Alli me hospedé en un lugar llamado "Hotel Ustel". Ustel en vaco significa prodrido... el nombr eno me atraía, y mucho menos la lentitud con la que servían la cena.. pero las habitaciones eran muy grandes.
La verdad es que me fué imposible buscar a PAPA UNICORNIO y decidí ir a París, mi último destino.
Allí vi como ese idiota se tiraba por la torre Eiffel.Por suerte para mi y todos los unicornios, éste aterrizó sobre un negro que se dedicaba a vender llaveros con forma de torre.

El viaje terminó sin poder conocer a papá unicornio, pero al menos conservo su foto:

La verdad es que es algo como una tortuga cornuda, algo raro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por comentar <3