Pepinos mutantes

Los unicornios sabían lo que pasaba en la tierra con Alemania y sus gérmenes mutantes, pero no esperaban que la crisis del pepino llegase hasta Yepelin.

Todo comenzó una mañana en la que Bluby se bañaba en la cascada de chocolate de la montaña strawberry. Mientras buceaba avistó una especie de bicho alargado y verde con cuerno. Asustado, huyó a casa a contáselo al pueblo.  

 En un principio, pensaron que Bluby había vueto a esnifar polvos de unicornio y que estaba viendo alucinaciones. Pero se dió la vuelta a la tortilla al oir un grito despavorido de la panacornidería (panadería para los humanos). 

Ahí estaba Estepona (la panadera del pueblo) con un pepino entre sus patas intentando morderla. Hubiese sido una bonita escena porno, pero sólo por esta vez...había que hacer algo.

Yepelin entero se puso de acuerdo para poner fin a todo ésto. Los humanos habían empezado a creer que no eran los pepinos los causantes de las muertes, pero los unicornios estaban seguros de que sí lo eran.